Consumo de sustancias
¿Qué es?
El consumo de sustancias (o utilizar sustancias adictivas como alcohol, tabaco y drogas ) es bastante común. Una encuesta reciente encontró que casi el 50% de los estadounidenses mayores de 18 años bebió alcohol en el último mes, y casi un cuarto de los estadounidenses mayores de 18 años reportó haberse embriagado en el último mes.1
Debido a que una parte de nuestra cultura normaliza su uso, muchos de nosotros empezamos a consumir sustancias como un medio para socializar o incluso para enfrentar el estrés. Hay cuatro motivos por los cuales las personas empiezan a consumirlas de forma más regular:
- Para sentirse bien (sensación de placer, “euforia” o "intoxicación").
- Para sentirse mejor (reducir el estrés, olvidar problemas o sentirse anestesiado).
- Para hacer las cosas de mejor forma (mejorar el desempeño o el razonamiento).
- Por curiosidad y por la presión de nuestros pares, o para experimentar.
Pero lo que comenzó simplemente como una copa después del trabajo, se puede transformar rápidamente en una copa diaria, y después en dos a tres copas, y luego en beber todo el día. Esto se debe a que sustancias como las drogas y el alcohol pueden ser adictivas, y debido a nuestra química cerebral y factores genéticos, puede ser difícil consumirlas con moderación.
Esta suele ser la forma en que el consumo de sustancias se puede convertir en abuso de sustancias, lo que puede tener muchos efectos negativos en tu salud, tus relaciones con las personas que amas y en la calidad de tu vida en general. Hay una diferencia entre consumo y adicción, y para ser consciente de los efectos que las sustancias tienen en ti y en tu salud mental es importante comenzar por monitorear tu propio consumo más de cerca.
¿Qué lo causa?
El consumo de ciertas sustancias (ya sean drogas o alcohol) puede afectar la química cerebral, en especial lo que se conoce como los sistemas de recompensa. Estos sistemas han evolucionado para reforzar los comportamientos necesarios para nuestra sobrevivencia. Por lo tanto, cuando ingerimos algún alimento, una sustancia química en nuestro cerebro que se llama dopamina nos hace sentir placer y satisfacción. Esto nos envía el mensaje de que nos sentiremos bien otra vez si seguimos comiendo, y por eso encontramos formas de volver a hacerlo.
Cuando una persona se vuelve adicta a una sustancia, es porque esa sustancia provoca que se libere un enorme flujo de dopamina, por lo general mucho mayor (casi 10 veces más), del que se podría liberar al ingerir cualquier otra sustancia “natural”.
Nuestro cerebro recuerda eso, y entonces esa sensación de placer se asocia con el consumo de la sustancia, e incluso con las situaciones en las que se consumió la sustancia (las personas con las que estábamos, el entorno social), igual que en el caso de la comida. Como resultado, continuaremos buscando esa sensación, o en otras palabras, encontrando maneras de consumirla otra vez.
Sin embargo, con el tiempo desarrollamos tolerancia, y necesitamos cada vez más de la sustancia para que se produzca la misma sensación. El deseo de consumir está motivado por el hábito y por los cambios que la sustancia produce en nuestro cerebro, no por una decisión racional.
Pero una vez que comenzamos a consumirlas a pesar de las consecuencias, se convierte en un trastorno por consumo de sustancias y podría requerir desde una desintoxicación, hasta medicación y tratamiento terapéutico.
Más allá del aumento en la cantidad y frecuencia en tu consumo de sustancias, hay otras señales a las que prestar atención:
- Aislarte, incluyendo dejar el trabajo y las reuniones sociales de lado para poder consumir sustancias. O ya no esperar a estar con otras personas para consumirlas, y decidir hacerlo solo.
- Consumir sustancias todos los días y muchas veces al día, incluyendo las mañanas.
- Sentir la urgencia de consumir sustancias cuando no las tienes.
- Consumir regularmente de forma excesiva o darse atracones de sustancias tanto en privado como en situaciones sociales.
- No ser capaz de parar o moderar el consumo de sustancias a pesar de las consecuencias.
- Problemas sociales: no poder completar tareas en la casa o en la escuela, o dejar de realizar actividades que disfrutas.
- Cambios en el sueño, enfoque o motivación.
- Realizar actividades peligrosas, como manejar o tener sexo sin protección, cuando estás bajo los efectos de sustancias.
La adicción es una enfermedad, y como cualquier enfermedad, hay muchas maneras de tratarla. Prestar atención a las señales potenciales de alerta suele ser útil antes de que empeoren las cosas. Sin embargo, el primer paso es admitir que podrías tener un problema y tener curiosidad por querer investigar un poco más, que es justo lo que estás haciendo aquí.
Emociones relacionadas, estado de ánimo y desafíos en la vida
El consumo de sustancias suele estar relacionado con tus estados de ánimo y tus emociones. Es importante entender por qué estamos recurriendo a las sustancias, y si nos están impidiendo enfrentar de una manera más saludable los factores de estrés que afectan nuestra vida, o incluso sentir.
Condiciones relacionadas
Hay varios trastornos de ansiedad y del estado de ánimo que están relacionados con el consumo de sustancias. Algunas veces estas condiciones se desarrollan debido al consumo de sustancias y en otros casos son las condiciones las que conducen al consumo de sustancias, lo que puede empeorar las cosas. Estos son algunos ejemplos.
¿Cómo lo puedo manejar?
Cuando se trata de consumo de sustancias, una de las cosas más difíciles es ser honesto contigo mismo sobre tu consumo y reconocer cuándo la situación se pudiera haber salido de control. Aceptar que tienes un problema de abuso de sustancias podría requerir mucha fortaleza, y eso comienza por notar cambios en tus patrones de consumo en cuanto a cantidad y frecuencia, así como en tus comportamientos. Podrías notar que estás teniendo problemas de concentración o motivación, o que estás peleando más con tus seres queridos. Haz un balance en cuanto a la relación entre estos síntomas y tu consumo.
Una vez que sabes que tienes un problema (o que te preocupe estar yendo por ese camino), hay muchas maneras de intentar pedir ayuda y empezar a ayudarte a ti mismo. Estas incluyen:
- Cambiar las cosas en tu entorno para disminuir la tentación de consumir sustancias. A menudo nuestra vida social es la que motiva nuestro consumo, y es importante reconocer eso y ponerte límites saludables. Por ejemplo, si la sustancia que consumes es alcohol, esto podría incluir encontrar amigos que estén sobrios o realicen actividades sociales sin que haya alcohol, o sustituir el alcohol por jugos o bebidas sin alcohol cuando estás en un lugar donde sirven alcohol.
- Elaborar un plan para detener el consumo. Reducir el consumo suele ser un proceso gradual, y para la mayoría de las personas puede ser difícil simplemente “dejarlo”. A final de cuentas, se trata de una enfermedad mental. Lo que puede ser más útil en su lugar es establecer reglas para ti mismo sobre cuándo, cuánto y qué sustancia puedes consumir. Tal vez necesites ayuda para dejar un medicamento, o un parche o chicles si se trata de dejar de fumar.
- Buscar mecanismos de afrontamiento alternativos: El consumo de sustancias suele aumentar cuando tratamos de minimizar sentimientos intensos o enfrentar eventos estresantes. Es importante reconocer en primer lugar qué lo desencadena y después encontrar formas alternativas de afrontar esas situaciones, como escribir un diario o correr.
- Buscar terapia o un grupo de apoyo: El consumo de sustancias puede hacer que te sientas solo, en especial si tu hábito ha afectado a tus seres queridos. Recurrir a alguien, específicamente a un grupo de apoyo, puede ayudar en este tipo de circunstancias. Busca grupos de AA o NA en tu localidad. La mayoría de estos grupos de apoyo son gratuitos, y además de ayudarte a potenciar tu voluntad, te pueden ofrecer la oportunidad de crear nuevas y maravillosas conexiones con personas que están en una situación similar a la tuya.
- Concéntrate en lo que puedes controlar: Un elemento central de los grupos de AA es la oración de la serenidad, que es realmente útil cuando estás intentando ajustar tu forma de pensar y hacer frente a la situación. Hay cosas que están bajo tu control y cosas que no, y no deberías dedicar tu energía a estas últimas.
Por supuesto, no existe un único enfoque “correcto” para abordar el consumo y abuso de sustancias. El mejor enfoque es el que funciona para ti y para la sustancia específica de la cual se trate en tu caso, así que vale la pena intentar diferentes cosas hasta encontrar la combinación correcta.
Cosas que puedes probar
Si tienes problemas de consumo de sustancias, estos son algunos métodos comprobados que pueden funcionar como punto de partida para hacerle frente.
- Para:
- Desgaste ,
- Duelo y pérdida ,
- Soledad ,
- Tristeza
- Para:
- Desgaste ,
- Duelo y pérdida ,
- Soledad ,
- Trauma ,
- Problemas en el trabajo y desempleo
- Para:
- Adicción no relacionada con sustancias ,
- Consumo de sustancias ,
- Enojo ,
- Culpa ,
- Preocupación ,
- Soledad ,
- Descubrir tu género y sexualidad ,
- Tristeza ,
- Vergüenza
- Para:
- Consumo de sustancias ,
- Trauma ,
- Adicción no relacionada con sustancias ,
- Conflictos familiares ,
- Problemas de dinero ,
- Culpa ,
- Tristeza ,
- Preocupación
- Para:
- Duelo y pérdida ,
- Culpa ,
- Soledad ,
- Tristeza ,
- Problemas de salud crónicos y discapacidades ,
- Conflictos familiares ,
- Problemas de dinero ,
- Desgaste
¿Qué puedo hacer ahora?
El hecho de que hayas llegado hasta aquí y que hayas aceptado que podrías tener un problema de consumo de sustancias y necesitas ayuda, demuestra una fortaleza enorme. No estás solo y hay muchos recursos disponibles para ayudarte a medida que trabajas en esto.
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Directorio en línea | Grupo de apoyoAl-AnonPuede que nuestras situaciones personales sean diferentes, pero las compartimos como iguales por lo que tenemos en común: nuestras vidas se han visto afectadas por el consumo de alcohol de otra persona. Al-Anon es un grupo de apoyo mutuo.
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Directorio en línea | Grupo de apoyoAlcohólicos Anónimos (AA)Alcohólicos Anónimos es una comunidad de personas que comparten entre ellas su experiencia, fortaleza y esperanza, con el fin de resolver su problema común y ayudar a otros a recuperarse del alcoholismo. El único requisito para ser miembro de AA es el deseo de dejar de beber. No se cobra ninguna cuota ni se obtiene un pago por ser miembro de AA: nos sustentamos a través de nuestras propias contribuciones.
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Directorio en líneaEncuentra un grupo de apoyo | Psychology TodayEncuentra listados detallados de terapia de grupo en Estados Unidos.
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Directorio en líneaFindTreatment.govUn recurso confidencial y anónimo para personas que buscan tratamiento para trastornos mentales y por consumo de sustancias en Estados Unidos y sus territorios.
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Línea de ayudaLa línea de ayuda nacional de SAMHSALa línea de ayuda nacional de SAMHSA, 1-800-662-HELP es un servicio de información confidencial, disponible las 24 horas del día, los 365 días del año, en inglés y en español, para personas y sus familiares que enfrentan trastornos de salud mental y/o relacionados con el consumo de sustancias. Este servicio ofrece referencias a instalaciones de tratamiento locales, grupos de apoyo y organizaciones de base comunitaria.
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Directorio en línea | Sitio web | Herramientas interactivasShatterproof Treatment AtlasShatterproof Treatment Atlas (en español) es una plataforma gratuita y confidencial que ayuda a las personas a entender sus necesidades y recibir tratamiento. Al responder unas breves preguntas, esta herramienta te indicará qué pasos seguir. Todo el contenido está disponible en inglés y en español.
Referencias
- NIAAA (National Institute on Alcohol Abuse and Alcoholism). Alcohol Use in the United States: Age Groups and Demographic Characteristics (en inglés)